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Las claves de la regulación de las apuestas deportivas en Brasil

El proyecto de ley de apuestas deportivas pasó por las Comisiones de Deportes y de Asuntos Económicos del Senado, y ahora deberá ser votado por los senadores. Fue impulsado por el Poder Ejecutivo y ya cuenta con la aprobación de la Cámara de Diputados. Con las actuales enmiendas, las apuestas online están cada vez más cerca de formalizarse en Brasil.

Bandera de Brasil sobre un gramado de fútbol.

Brasil está a un paso de legalizar las apuestas deportivas por ley.(©stux/Pixabay)

Las apuestas deportivas, a un paso de la regulación

Desde hace un largo tiempo las autoridades brasileñas vienen trabajando en la reglamentación de las apuestas a distancia. El proyecto fue pasado por alto por la administración de Jair Bolsonaro, pero volvió a cobrar fuerza con el regreso de Inácio Lula Da Silva al gobierno. Ahora, tras ser aprobado por la Cámara de Diputados, está a punto de ser tratado en el pleno del Senado. De contar con la mayoría necesaria, se convertirá en ley.

En las últimas semanas, el proyecto ha estado bajo la revisión de la Comisión de Deportes y la Comisión de Asuntos Económicos. En ambos casos, los participantes dieron sus puntos de vista sobre los diversos aspectos que hacen a la normativa, según su área de incumbencia. Ya hay más de 70 enmiendas que se volverían efectivas. Por tratarse de una ley con la firma del presidente de la República, los senadores tienen hasta el 11 de noviembre para resolver la votación.

En la Comisión de Deportes, el proyecto contó con la exposición del senador Romário (PL-RJ). Allí se desarrollaron temas relativos a la transparencia de la actividad, en especial en función de librar al deporte de cualquier incidencia negativa. La FIFA advierte que los jugadores, entrenadores y todas las personas cercanas a la práctica deportiva tienen prohibido apostar en partidos de fútbol.

Por el lado de la Comisión de Asuntos Económicos, el debate giró sobre todo en torno a la contribución fiscal de la industria, que ya fue debatida por la Cámara de Diputados. Según el proyecto actual, los fondos se destinarán a la acción social (2%), el deporte (6,63%), la educación (1,82%) y el turismo (5%). El expositor en este caso fue el senador Angelo Coronel.

Una ley de apuestas a distancia que va cobrando forma

Una de las modificaciones de Asuntos Económicos de última hora es la relativa a lo que le quedará de sus ingresos a las casas de apuestas. El proyecto de Ley 13.756 del año 2018 estipulaba que sería un 95%. Ahora, se bajó hasta un 82%.

Este cambio se llevó a cabo por distintas consideraciones, como la comparación con otras reglamentaciones de juego online de la región. Además, se tuvo en cuenta que Brasil es el mercado más voluminoso de América Latina, y el país con más visitas a páginas de apuestas deportivas en todo el mundo. El atractivo para las empresas es más que evidente.

En el PL 3.626/2023 se da una definición abarcadora de las apuestas de cuota fija, en la que se incluyen los juegos virtuales, los eventos de temática deportiva y todo lo que en general comprende el catálogo de una casa de apuestas internacional. Para operar legalmente en Brasil, las plataformas deberán contar con la licencia del Ministerio de Hacienda, que tendrá una validez de hasta cinco años. El costo del valor de contraprestación está reglamentado en R$30 millones.

Además, han quedado fuera del plano las publicidades engañosas. En ese sentido, el proyecto es más restrictivo que las reglamentaciones de otros países de América Latina, puesto que excluye el marketing que relacione las apuestas al éxito personal o social y prohíbe la participación de atletas profesionales en las campañas. En el mismo sentido, se impulsa la acción de los operadores para fomentar la transparencia en el deporte.

Las infaltables polémicas en torno a la casas de apuestas

Cada vez que la regulación de las apuestas se abre al debate, surgen perspectivas críticas y escépticas sobre el tema. En este caso, la principal oposición se vio en la Comisión del Deportes del Senado por el senador Eduardo Girão (Novo-CE). Su argumento es que se debe dilatar la votación, con la idea de tomar todas las medidas posibles para hacer de la actividad un terreno lo más limpio posible.

Girão ha sido una de las voces más polémicas en todo el desarrollo de la presente ley. Solicita que se realicen más audiencias públicas en la Comisión de Deportes, para incluir más voces sobre el asunto. Además de las posibles complicaciones para los públicos vulnerables, el senador llamó la atención sobre los posibles amaños de resultados en función de ganar apuestas.

La senadora Leila Barros (PDT-DF) secundó la voz de Girão, haciendo énfasis en la gran responsabilidad que representa la legalización del juego online para el Estado. Expuso que habrá que poner en marcha medidas de salud específicas para la ludopatía, en un contexto donde el SUS (Sistema Único de Salud) está sobrecargado.

El senador Carlos Portinho (PL-RJ) también subrayó la importancia de mantener a los menores de edad lejos de las casas de apuestas, y pidió que se revean las medidas para que esto suceda. El senador Cleitinho (Republicanos-MG) hizo eco de estos pedidos, enfatizando los posibles efectos negativos que el juego puede llevar a las personas en situación de vulnerabilidad.

El debate no ha concluido, pero la ley cada vez está más cerca de convertirse en una realidad, y los brasileños podrán apostar legalmente desde el celular o la computadora, tal como sucede en cada vez más países del mundo.

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