Escrito por: Juana González
La Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar) presentó un proyecto ante el Ministerio de Economía y Finanzas para impulsar la desmonopolización del mercado. Se trata de una propuesta para modificar numerosos aspectos del reglamento y para derogar la ley existente.
Conajzar presentó un proyecto para impulsar la desmonopolización del mercado.
Por una reforma profunda de reglamentación de juego
Está claro que la ley que regula los juegos y las apuestas en Paraguay está viendo sus últimos tiempos tal como se la conoce. Desde diversos sectores del gobierno avanzan propuestas de modificación y, en este caso, de derogación.
Se trata del proyecto realizado por la Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar), según declaró el presidente de la entidad, Carlos Liseras. Comprende una modificación plena de el reglamento de juego y pide que se derogue la Ley n.° 1016/97.
El proyecto fue presentado ante el Ministerio de Economía y Finanzas a fines del año pasado. Ahora será competencia del Poder Ejecutivo la revisión del documento y su envío a la Cámara de Diputados.
La ley de juego de Paraguay data del año 1997 y no da cuenta de las necesidades del mercado actual. Asimismo, no contempla en absoluto los elementos que forman parte de la industria de las apuestas online, ni tampoco los estándares de seguridad de un jugador virtual.
Contra el monopolio y por más cambios
El presidente de Conajzar ha expresado su apoyo por el actual proyecto para modificar la ley de juego. Se trata de una iniciativa impulsada por el sector del diputado Adrián “Billy” Vaesken que intenta ponerle fin al sistema de monopolio en apuestas deportivas y quiniela.
En la actualidad, la adjudicación de esas actividades solo puede estar en manos de un operador. El espíritu de la legislación apuntaba a evitar la saturación del mercado, pero no tenía en cuenta los volúmenes demográficos y corporativos de estos tiempos.
La asignación de Aposta.la el año pasado como única plataforma de apuestas generó mucha polémica, en especial porque este operador ya había tenido la concesión durante los pasados 5 años, además de las controversias que marcaron la readjudicación.
El proyecto de Conajzar no solo apuntaría a este tema, sino que iría por más. No se trata de una modificación a la ley, sino de una derogación completa para redactar una reglamentación nueva.
Además del cambio en las concesiones, se plantea una normativa específica para combatir el lavado de dinero. Este es uno de los problemas que más se ha visto en la industria del juego paraguaya.
Otro punto importante es el del desarrollo de un protocolo de juego responsable acorde al siglo XXI. El poder para la centralización del control estaría designado en Conajzar, que pasaría de ser una Comisión y a ser una Dirección, y se llamaría Dinajzar.
El organismo seguiría a cargo de la lucha contra el juego clandestino, que es una de sus principales competencias en la actualidad.
Sobre el proyecto de ley antimonopolio en curso
La normativa de adjudicación de concesiones podría haber sido tratada, pero se tomó la decisión de aplazarla durante 90 días. De cumplirse esto, se vencerá el contrato por la quiniela de Technologies Development of Paraguay (TDP SA) y se elegiría una nuevo adjudicatario.
La empresa que entre en ese caso tendrá la licencia por el monopolio de la quiniela durante otros cinco años. Por este motivo ha habido reclamos en la Cámara de Diputados, puesto que al postergarse el debate sobre la modificación se estaría dando lugar a cinco años más del mismo modelo.
La firma Decreto TDP SA opera gracias a la asignación del Decreto n.° 4452/2020 y es propiedad del empresario Álvaro Wasmosy. Es uno de los candidatos a quedarse con la licencia para explotar la quiniela en el país.
Cómo adaptarse a una industria que no para de crecer
Según el registro de Conajzar, los juegos de azar y las apuestas crecieron un 10% en el 2023. La recaudación impositiva fue de 158.080 millones de guaraníes (US$21,35 millones).
Esta misma tendencia se ha mantenido a lo largo de los primeros meses del 2024. El segmento online es una de las claves de esta explosión, aún teniendo en cuenta que los informes de Conajzar no contemplan la actividad de las páginas de apuestas sin licencia.
Todo sitio sin la certificación del Estado está considerado como ilegal, pero no existe orden de darlos de baja. Solo Aposta.la cuenta con el beneplácito oficial. La industria digital se desarrolla en ese espectro gris; esto cambiaría con la apertura propuesta por las modificaciones a la ley.
