El proyecto de ley que regula los casinos online y las apuestas deportivas fue aprobado en la Cámara de Diputados por 80 votos a favor, 36 en contra y 18 abstenciones. Ahora deberá ser sometido a votación en el Senado. El empresariado pide una rebaja de la contribución impositiva, que quedó gravada como una de las más altas del continente.
La Cámara de Diputados chilena le dice sí al juego online
Desde hace varios años que existen proyectos para formalizar el mercado de apuestas digitales en Chile. Sin embargo, siempre habían sido desviados de las cámaras parlamentarias, hasta que su aplazamiento se hizo inviable. Ahora la Cámara de Diputados ha aprobado la legislación y le dio el primer impulso necesario al modelo.
La votación en el Congreso cerró con 80 votos a favor, 36 en contra y 18 abstenciones. En paralelo, la reglamentación del quórum especial tuvo 97 votos a favor, 28 en contra y 9 abstenciones. Esta acogida a la ley se concretó según lo que se había previsto a partir del trabajo en las comisiones.
Con esta ley, se darán las condiciones para el funcionamiento de casinos online y casas de apuestas de manera reglamentada. El proyecto incluye los requerimientos para solicitar la licencia y poner en marcha la fiscalización. Los operadores comenzarían a pagar impuestos como en cualquier otra industria, tema que deberá ser resuelto en el Senado cuando sea el momento de su votación.
Como parte de la normativa, se prohíbe de manera explícita la participación en las apuestas de menores de edad, bajo sanciones muy severas para las plataformas que lo permitan. También se establecen reglas para detectar casos de juego problemático, junto con protocolos para que los operadores tomen medidas al respecto.
Rumbo al fin de un sistema monopólico de juego
Con este paso por vías legislativas, las empresas de juego online podrán acceder a un mercado semi abierto, que reemplazará el modelo de monopolio que rige hasta el momento. La única firma con permiso para desarrollar apuestas a distancia es La Polla de Beneficencia. Esta situación ha llevado a disputas legales entre operadores extranjeros y locales, que finalizó con un fallo de la Corte Suprema para dar de baja todas las plataformas de juego online que funcionaban en el país.
Dada esta situación, desde el Ministerio de Hacienda se solicitó un período de cooling-off, que es como se conoce al enfriamiento del mercado. El plazo es hasta que se promulgue la ley, en caso de ser finalmente aprobada por los senadores. Por eso es que hay un particular interés de que la legislación pase rápidamente por la cámara alta.
El mercado de juego digital estará controlado por la Superintendencia de Casinos y Juegos, cuyo nombre cambiará a Superintendencia de Casinos, Apuestas y Juegos de Azar. Para la emisión de las licencias, los operadores deberán superar los requisitos técnicos y financieros que estipule la ley.
En el mismo sentido, se dará inicio al proyecto de “Política Nacional de Apuestas Responsables” bajo la supervisión del Ministerio de Hacienda, en colaboración con el Ministerio de Salud y la Superintendencia. Con esto se garantizará un marco para la prevención de la ludopatía en el territorio nacional, así como recursos para fomentar el juego responsable.
El proyecto incluye medidas estrictas para sancionar las páginas que actúen por fuera de la ley. Se tratará de multas disciplinarias de índole económica y limitaciones comerciales. Los diputados ampliaron el espectro de delitos relacionados con el juego clandestino.
Los impuestos al juego, un punto de controversia
Actualmente el impuesto a los ingresos brutos de los casinos en Chile es uno de los más altos del mundo. El gravamen que se fijó en el Congreso para el juego online es algo más bajo, pero sigue siendo uno de los más onerosos de la región. Se trata de una contribución del 20% sobre los ingresos brutos más una tasa de aporte al juego responsable que sumará un 1% de carga impositiva sobre los ingresos brutos al año.
Además, las plataformas habrán de enviar un 2% de sus ingresos brutos al sector del deporte. Un tercio de ellos será destinado al Instituto Nacional del Deporte, otro tercio irá al Comité Olímpico de Chile (COCH), y el tercio final será para el Comité Paralímpico de Chile.
Según los representantes legales de los operadores internacionales, estos porcentajes contributivos estarían algo por encima de lo esperado, y se trabajará para que el Senado revea los impuestos. Asimismo, se ha pedido para el levantamiento del cooling-off en vista de que el mercado ya está en vías de regulación. Con las bases para la explotación justa de la actividad, las plataformas de juego en línea ya quieren poner primera en Chile.