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Brasil: ministro de Hacienda impulsa la reglamentación del juego

Fernando Haddad, uno de los ministros más importantes del gabinete de Inácio “Lula” Da Silva, se ha mostrado favorable a una tributación de operadores de apuestas deportivas en línea. Con esto, se marca a disposición del actual gobierno brasileño a legislar los juegos de azar en Brasil. La materia había quedado pendiente luego de la negativa del gobierno de Bolsonaro.

Persona de espaldas con la camiseta de Robinho en un estadio de fútbol levantando la bandera de Brasil.

Ethereum y bitcoin cayeron casi un 5% a principios de marzo.(<©MichaelWuensch/Pixabay)

Las apuestas deportivas, claves para el gobierno

En una reciente entrevista con medios brasileños, el ministro de Hacienda de Brasil, Fernando Haddad, ha anunciado que este mes impulsará un proyecto para que las casas de apuestas deportivas paguen impuestos en el país. Con esto, se le daría un marco legal a la actividad, que genera enormes sumas cada año. El ministro justificó la propuesta argumentando que esta es la manera en la que se administran las apuestas deportivas en los principales mercados del mundo.

Esta postura del gobierno de turno es marcadamente opuesta a la del anterior, el cual era dirigido por el líder derechista Jair Bolsonaro. La gestión del presidente Lula Da Silva, referente del PT, ya avisó que ve con buenos ojos la legislación de las apuestas en el país. Se trataría de una fuente de ingresos más que significativa para el fisco.

Si bien no hay un boceto oficial del proyecto, el ministro Haddad ya aseguró que su equipo está trabajando en el tema. Este mes se entregaría la propuesta al Congreso y al Poder Ejecutivo. Según informan medios locales, el impuesto no tocaría a los casinos ni a las loterías. Se trataría de un gravamen destinado a las ganancias por las cuotas de las casas de apuestas.

El proyecto es parte de la reforma impositiva del gobierno, que incluye recortes de impuestos a las ganancias. Ahora, quienes cobren el doble del salario mínimo no deberá pagar ese impuesto. Ese faltante será compensado, posiblemente con creces, con lo que se percibirá de las apuestas deportivas.

Las fuentes del Senado apuntan a una recaudación de R$20,4 mil millones (US$3,9 mil millones), de los cuales el 10% sería destinado a Embratur, el Instituto Brasileño de Turismo.

Una reglamentación que se demora

La ley de juego brasileña parecía estar lista para ser formalizada cuando en el 2021 la Cámara de Diputados aprobó un proyecto. Sin embargo, las trabas puestas desde el Poder Ejecutivo y las cancelaciones en el Senado hicieron que no se pudiera seguir tratando en sus vías legislativas. Fue un tema que se volvió mediático en la campaña electoral del 2022 y dividió la opinión de la gente.

Los canales institucionales parecían ser favorables a un reglamentación para los juegos en general. Sin embargo, la perspectiva del ex presidente Bolsonaro, representante de sectores religiosos muy conservadores, disuadió el debate sobre el tema. La legalización del juego, que en Brasil está casi totalmente prohibido desde hace más de medio siglo, podría jugarle en contra en su campaña por la reelección, la cual al fin de cuentas se vio marrada.

Bolsonaro había advertido que, de ser legalizados, los juegos serían vetados por decreto. Muchos funcionarios de su partido mostraron argumentos bastante radicalizados en contra de la habilitación de las apuestas, llegando a utilizar razones religiosas en el Congreso. Ahora los vientos políticos han cambiado.

Un negocio que no se puede escapar

Tan pronto como asumió nuevamente el gobierno, el presidente Lula Da Silva supo aprovechar la contingencia. De inmediato anunció que los juegos de azar deberían estar sujetos a un tratamiento fiscal, y ahora, a través del ministro de Hacienda, parece haber encauzado esos ingresos. Es el primer paso real para que las apuestas en Brasil dejen de ser una industria ajena al sistema fiscal.

El país está primero en números de visitas a páginas de apuestas deportivas, de las cuales bet365 está en primer lugar. El fervor que genera el fútbol es el principal motor de este fenómeno, que también está impulsado por el furor de reality shows y deportes electrónicos. Cada vez son más las plataformas que se instalan en el país.

De hecho, es un aluvión imposible de contener, pues los gigantes internacionales aterrizan en Brasil con fondos suficientes para ingresar como sponsors de clubes deportivos. De esta manera se instalan comercialmente y su imagen permea en una amplia audiencia. La situación actual del mercado requiere de la actuación del Estado para ganar solidez plena, y esa parece ser la agenda de este año.

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