Nueva app de ADM para garantizar el juego seguro en Italia
En Italia la Dirección de Aduanas y Monopolios (ADM) ha desarrollado una nueva app que servirá para informar al público sobre los operadores de juegos habilitados. Los datos arrojarán luz sobre casinos físicos y online, así como sobre casas de apuestas. Es un intento del gobierno por detener el juego sin regulaciones, al tiempo que se intenta darle más transparencia al sector.
Gioco Siguro, la app para combatir el juego ilegal
El nombre del producto lanzado por ADM es “Gioco Siguro” (juego seguro), y está disponible desde noviembre. Esta app contiene el listado de todos los operadores habilitados en Italia, para que los usuarios no tengan dudas sobre la validez de las licencias o la vigencia de los certificados. También presenta la opción de reportar las actividades sospechosas o indebidas de manera directa con las autoridades. Está disponible para iOS y Android.
Este producto fue autorizado por el director de ADM, Marcello Minenna, quien ocupa esa posición desde el año 2019. Minenna ya había trabajado en una área afín de la policía, en particular en la división anti-mafia de Investigación Glassia. Sus pesquisas descubrieron más de €1.000 en fugas provenientes del juego ilegal, que está controlado por las asociaciones delictivas italianas.
Esta suma, sin embargo, es ínfima en comparación con lo que se estima que mueve el juego no regulado. Según las averiguaciones del fiscal a cargo del seguimiento de la mafia, Federico Cafiero De Rao, el monto en circulación podría ascender a €20.000 millones, o incluso a una cifra aun mayor. Todo esto es dinero en apuestas sin garantía alguna de transparencia, que no hace más que perjudicar a los usuarios.
Regulaciones duras en un mercado que intenta prosperar
Si bien el gobierno italiano es tajante en su abolición del juego ilegal, el marco legislativo para las apuestas reguladas es muy estricto y duro. Los operadores deben ajustarse a numerosos protocolos, que implican una fuerte inversión en garantías de seguridad y transparencia. Asimismo, las pautas de marketing son restrictivas y no fomentan la publicidad del sector.
Los representantes de la industria del juego en Italia están a la espera del presupuesto legislativo del 2022, con la esperanza de que incluya flexibilizaciones para el área. Este es un asunto que viene en negociación desde hace tiempo, pero tradicionalmente el gobierno italiano se ha mostrado reacio a impulsar el juego como actividad industrial.
Durante el 2022, la ADM deberá encargarse de renovar unas 10.000 concesiones de juego, que alcanzan sobre todo a las franquicias de Lottomatica, Eurobet, Snaitech, SKS365 y Sisal. Los representantes de la industria están expectantes por la continuidad de las habilitaciones, pues desde el comienzo de la pandemia, los ingresos cayeron sensiblemente, y aún se espera por su reactivación total.
El juego seguro también avanza en España
Este tipo de implementaciones para mantener la seguridad y la transparencia del sector no es exclusivo de Italia. En España también hay numerosas medidas, herramientas y recursos que tienen la misma finalidad: combatir el juego ilegal y promover las empresas que se ajustan a las reglamentaciones.
Este año, por ejemplo, la DGOJ ha avanzado con un proyecto para impulsar la aplicación del artículo 8 de la Ley 13/20211, que trata sobre el juego seguro. Entre las medidas que se proponen se incluye la creación de un departamento exclusivamente dedicado a la prevención de las adicciones y las conductas compulsivas.
Asimismo, en marzo de este año la patronal de juego en línea, Jdigital, inauguró una línea telefónica de asistencia sobre juego responsable en colaboración con la Federación Española de Jugadores de Azar Rehabilitados (FEJAR). Este recurso era una de las obligaciones que indicaba la enmienda a la ley de juego.
El último Informe de Sostenibilidad 2020/21 de la EGBA , la Asociación Europea de Juegos y Apuestas, arroja luz sobre los avances de la industria del juego en materia de prevención y cuidado. También aporta datos sobre la actividad de los distintos gobiernos europeos. Entre los hallazgos más significativos se cuenta que alrededor del 75% de los usuarios tiene activada al menos una herramienta de seguridad, ya sea de forma voluntaria u obligatoria. Asimismo, durante el período estudiado por la EGBA, se enviaron 2,8 millones de comunicados personalizados a usuarios en relación con su comportamiento de juego.
Sin dudas, el juego seguro es una preocupación tanto del Estado como de la industria y el camino próspero del sector pasa por el cauce de la responsabilidad social. Si bien las políticas restrictivas en España y en Italia les ponen trabas a los operadores legales, también cercan el camino del crimen organizado en pos de un entretenimiento libre de amenazas para los usuarios.