RainbowEx: radiografía de una estafa Ponzi en Argentina

Un tercio de los habitantes de la localidad bonaerense de San Pedro depositaron dinero en RainbowEx en el último año, en lo que parece ser un esquema Ponzi de estafa. La entidad ya anunció su salida del país y la Comisión Nacional de Valores (CNV) de Argentina aclaró que no se haya inscripta en sus registros.

Hombre de traje llevándose una maleta llena de dinero.

La plataforma RainbowEx prometía un crecimiento de 2% diario en dólares.

Una estafa piramidal que se llevó puesto a un pueblo

La sociedad argentina se halla conmocionada por un caso de estafa que parece haber dejado fuertes secuelas. Casi un tercio de la población de la localidad bonaerense de San Pedro invirtió su dinero en el exchange RainbowEx, operado por la firma Knight Consortium, que no se halla inscripta en ninguna entidad oficial.

Unas 20.000 personas, de los casi 70.000 habitantes de San Pedro, confiaron en esta firma, que prometía un 2% de retorno diario en dólares a través de la inversión en criptomonedas. Se trata de un rendimiento por demás exagerado, rara vez visto en el mundo de las finanzas.

Para comparar: los bonos del tesoro de Estados Unidos rinden un 5% anual. Por su parte, el Índice Standard & Poor’s 500 (S&P 500) obtuvo un crecimiento de 15,2% en 10 años. Estas cifras, sin embargo, no son del conocimiento de las personas que recién se inician en la actividad.

Así lo indica el abogado Adolfo Erdaire, quien recibió más de 200 denuncias relacionadas con RainbowEx, no solo desde San Pedro, sino desde otras partes de la provincia de Buenos Aires y también desde la Capital Federal.

En cuanto a la Comisión Nacional de Valores (CNV) de Argentina, aclaró públicamente que RainbowEx no está inscripta para realizar operaciones en el país. La entidad cuenta con una plataforma de “Alertas al inversor”, en donde se desaconseja la inversión cualquier portal que no se encuentre registrado.

Ante la perspectiva de semejante retorno en dólares, los sampedrinos procedieron a vender sus pertenencias, incluyendo automóviles, y a sacar créditos de manera desesperada, con la intención de invertir todo en RainbowEx. Una fiebre que duró alrededor de un año.

En paralelo, un caso similar salió a flote en la localidad santafesina de Casilda, donde un grupo financiero, que opera con el nombre de Peak Capital, ofrece un 5% de rendimiento semanal en criptomonedas. Ya las autoridades están investigando también este fraude.

Detenidos, sitios bloqueados y una ciudad en shock

Luego de la pesquisa llevada a cabo por el fiscal Matías Di Lello, la Policía Federal Argentina detuvo a Luis Pardo y Martín Liberati. Estas personas estarían a cargo de la financiera Over Cash, la cual habría servido de base operativa para RainbowEx en el país.

Ambas personas habrían promovido activamente en la inversión en el exchange, llevando adelante lo que se entiende como una estafa piramidal del tipo Ponzi. También hay una investigación sobre la persona que sirvió de rostro visible para RainbowEx en este tipo, una mujer conocida como “la China” Alí.

Esta persona es la encargada de las comunicaciones con los usuarios vía Telegram. La población de San Pedro la identifica como la principal responsable de las transacciones y de la difusión de los productos. “La China” prometía beneficios económicos pocas veces vistos en el mundo financiero.

La presentación de la empresa Knight Consortium se dio mediante un evento en el Hotel Emperador de la Ciudad de Buenos Aires. Allí, ante los interesados en conocer sobre el tema, estuvieron los presuntos CEO de la firma, quienes explicaron cómo funciona el sistema de RainbowEx.

Al poco tiempo se dio a conocer que esas dos personas eran actores contratados. Se trata de Mauryc Lyczko y Filip Wałcerz, de origen polaco, quienes han sufrido escraches en las redes sociales y fueron contratados por quienes ahora están detenidos.

Su participación se dio a través de un casting. Los actores expresaron que también fueron víctimas de un engaño y que no tienen ninguna filiación real con el mundo de la inversión ni de las criptomonedas.

Luego de que la empresa congelara por 14 días las cuentas de sus usuarios, la Unidad Fiscal Especializada en Ciberdelincuencia (UFECI) ordenó a ENACOM que diera de baja el sitio de Knight Consortium, la plataforma de RainbowEx y la web desde donde se descargaban las aplicaciones, que ni siquiera estaban disponibles en las tiendas de iOS y Android.

¿Qué tipo de estafa es la que llevó adelante RainbowEx?

Hablar de “estafa” en esta instancia es algo apresurado puesto que, para el momento de escribir este artículo, la justicia argentina no había determinado si los fondos podían volver a los usuarios o no. Sin embargo, está claro que hay numerosas irregularidades como para ser pasadas por alto.

Los medios de comunicación se hicieron eco de los sucesos de San Pedro como un caso de estafa con criptomonedas. A pesar de que la plataforma decía utilizar este tipo de activos, se piensa que en ningún momento se hizo uso de ellos. No hay registro de esta plataforma en ningún tipo de cadena de bloques.

Los responsables de numerosos brókeres de criptomonedas se expresaron sobre el tema en el reciente evento Labitconf 2024, que nuclea a los especialistas del sector. Todos acordaron en que se trata de un caso que empaña los esfuerzos por mantener la integridad y la transparencia, aspectos básicos en nuestras opiniones de Libertex y otras plataformas de trading.

En efecto, se han detectado una gran cantidad de retiros en plataformas de criptomonedas a raíz de los sucesos en San Pedro. Esto se traduce como una falta de confianza en el área, que venía en crecimiento en el país y en la región.

La mayoría coincide en que no se trata de una estafa con criptomonedas sino de un fraude piramidal, particularmente del tipo Ponzi, como se ha apuntado más arriba. Este esquema está pensado para que cada usuario traiga nuevos inversores al sistema, y las ganancias de la cúpula se vayan pagando con los depósitos de la base.

Desde luego, se trata de un modelo insostenible y para nada sustentable, que está prohibido por las autoridades financieras. Se caracteriza por ofrecer retornos enormes, que generan una enorme ilusión entre las personas con pocos conocimientos sobre el tema.

Un síntoma de la época: falta de oportunidades y salvaciones milagrosas

La Argentina actual parece ser terreno fértil para este tipo de estafas. Con una desocupación en crecimiento y una caída de la histórica producción, la sociedad busca cualquier salvación para salir de la crisis. El índice de pobreza oficial del gobierno superó el 52%, y el de indigencia, el 16%.

A esto se le suma una desilusión con el mundo del trabajo. Son pocos los sectores del empleo cuyos salarios permiten llegar a fin de mes. Sin olvidar que más de la mitad de los trabajadores de la Argentina no está registrados, es decir, no cuentan con derechos laborales.

A pesar del caso de San Pedro, el gobierno recientemente ha autorizado a los menores de edad a operar activos en el mercado de valores. Los niños de a partir de 13 años podrán negociar todo tipo de herramientas financieras con el aval de su tutor.

Para los especialistas, esta medida podría ser trágica. El 60% de los menores de edad en el país está debajo de la línea de la pobreza, y los niveles de lectoescritura están en un nivel calamitoso. Esta combinación entre necesidad y falta de conocimientos podría ser un cóctel explosivo.

Por una vía similar se ve transitar a la oleada de ciberludopatía entre niños y adolescentes. Si bien está claro que la inversión financiera y las apuestas son asuntos distintos, tienen algo en común: ofrecen la promesa de un rédito a través de predicciones correctas, sin la necesidad de producción.

En un contexto signado por manifestaciones de jubilados y de universitarios, el horizonte para Argentina es cada vez más complicado. Seguramente haya una salida, pero no será a través de un golpe de suerte en la inversión financiera.

Jerónimo Corregido – Estafa.info – Editor jefe de la sección de noticias
1 de cada 3 habitantes de San Pedro invirtió su dinero en una plataforma sin registro en la CNV.