La agencia Moody’s Ratings le ha retirado las calificaciones corporativas, instrumental y de probabilidad de incumplimiento al grupo de juego de origen español. Se trata de un paso atrás en la reputación internacional de Codere, con lo que se pone en riesgo su presencia en la bolsa estadounidense de Nasdaq.

Codere viene sufriendo vaivenes corporativos y económicos desde hace años.
Moody’s le retira las calificaciones al Grupo Codere
La Corporación Moody’s ha tomado la decisión de retirar las calificaciones con las que evalúa al Grupo Codere. La medida se vuelve efectiva a partir de este año, y se debe a que la agencia estadounidense alega no contar con información suficiente para llevar a cabo la categorización.
Así lo explicó Moody’s en un reporte publicado en su sitio web, de acceso restringido. A partir de ahora, Codere no contará con la calificación corporativa (CFR) “Caa2” ni con la calificación de probabilidad de incumplimiento (PDR) “Caa2-PD”. La firma de origen español no estará más compendiada en uno de los rankings financieros más importantes del mundo.
Al mismo tiempo, Moody’s retiró la calificación instrumental “Caa2”, que se refiere a los bonos senior garantizados con vencimiento en 2028. Estos habían sido emitidos por Codere Finance 2, cuya sede está en Luxemburgo. Se reducen así las garantías de solvencia del grupo de juegos y apuestas.
Desde la agencia estadounidense aclararon que, antes del retiro de las calificaciones, la perspectiva para Codere era de estabilidad y recomposición. Los motivos para la decisión fueron la demora en informar los balances contables correspondientes al año 2023. Esta falta le ha traído varias consecuencias negativas a la corporación.
Codere no ha conseguido suplir a tiempo la salida de su auditor, que desistió de trabajar en los balances del 2023. A raíz de ello, desde Moody’s entienden que la firma ha entrado en un período de flaqueza en el área de gobernanza.
Asimismo, la agencia indicó que la compañía española no da muestras de transparencia en sus finanzas ni brinda señales claras de probabilidad de pagos a sus acreedores. En Codere ya hay preocupaciones por las facultades de gestión, luego de un puñado de años de reestructuración corporativa.
En el último trecho, la actividad de la firma ha estado enfocada en maximizar el rendimiento del negocio online, que ha dado muy buenos resultados. Sin embargo, estos esfuerzos parecen no haber llegado al puerto esperado.
En la cuerda floja de la bolsa de valores estadounidense
La tensión por la permanencia en el mercado de valores comenzó el año pasado, cuando Codere fue advertido por el Global Nasdaq Exchange. Esto se debió a la consabida demora en la presentación de las cuentas anuales del 2023, luego de que Ernst & Young se negara a auditar esos estados.
Codere también falló al entregar el formulario 20-F en tiempo y forma, lo cual agrava su situación. En noviembre recibió una nueva intimación de la bolsa de los Estados Unidos, y por ello la empresa solicitó una audiencia.
La cita fue para el pasado 16 de enero. Al momento de redactar este informe, no había habido comunicaciones oficiales de un lado ni del otro, por lo que se entiende que el estado de Codere sigue igual, es decir, las acciones de la empres aún cotizan en Nasdaq.
La corporación ha presentado un Plan de Cumplimiento para sostenerse en el mercado de valores más importante del mundo. Es una de las varias hojas de ruta que han trazado el camino de Codere en los últimos años, sin conseguir un solvencia completa.
Esto a pesar de que los bonistas le perdonaron €1.200 millones de deuda el año pasado, con lo que se redujo de manera más que considerable la carga de la compañía. Fue un hito para el saneamiento de las finanzas de Codere, en el que se representó el respaldo de los bonistas e inversores.
La deuda total de la empresa había quedado reducida a un instrumento único de €128 millones. Así y todo, el año pasado Moody’s reportó un descenso en las categorías de cumplimiento de Codere, colocando a la empresa en el escalón de “Caa2”, que implica una baja solvencia.
Sobre las categorizaciones de la corporación Moody’s
Los rankings de la Corporación Moody’s forman parte de la actividad de Moody’s Investors Service. Se trata de una de las agencias de calificación de riesgo con más peso en todo el mundo. Sus puntajes de solvencia van desde Aaa, que es el más alto, hasta el vasto repertorio de la C.
Sus servicios atañen tanto a corporaciones como a estados nacionales. Con esos indicadores, las entidades de crédito internacional toman decisiones sobre sus préstamos e inversiones. Asimismo, las categorías les sirguen a los accionistas para saber cuál es la perspectiva de su negocio.
Moody’s cuenta con el 40% del mercado global de calificación de riesgo, al igual que la agencia Standard & Poor’s. Si bien los indicadores de estas firmas pueden ser muy útiles, su representación no es exacta en el mundo de los negocios.
Tanto es así que, más de una vez, estas entidades han sido acusadas de presentar calificaciones bajas para socavar la reputación de gobiernos o grandes empresas. No parece ser el caso de Codere, que ve llegar las críticas desde todos los principales frentes globales de análisis financiero.
La compañía española confía más que nunca en el soporte de sus inversores para darle continuidad a su negocio a gran escala. Este año será determinante para evaluar la continuidad del grupo en Nasdaq o recomenzar la ruta por otras vías.