En el marco de la Eurocopa de este año, Interpol llevó a cabo el operativo “SOGA X”, mediante el que desmanteló una importante red de apuestas ilegales. Se incautaron €59 millones. Señalan que los ingresos del circuito clandestino de juego podrían llegar a los €1.700 trillones por año a nivel mundial.
Fuerte golpe de Interpol contra las apuestas ilegales
El pasado mes se confirmó la detención de 5.100 personas en unos treinta países, a través del operativo “SOGA X” llevado a cabo por Interpol. De esta manera se consiguió desmantelar una organización de apuestas clandestinas que se servía de todo tipo de delitos para llevar a cabo sus funciones.
Participaron también las fuerzas de seguridad de varios países, entre ellos España. Además de detenciones, Interpol incautó €59 millones, que representarían ingresos por las apuestas. Se trata de dinero que está libre de impuestos, por evadir todas las reglamentaciones y los sistemas de control.
El operativo estuvo enmarcado en la Eurocopa 2024, que se llevó a cabo en Alemania entre junio y julio. Este tipo de competiciones significan un aumento masivo en el volumen de apuestas deportivas, tanto de las legales como de las ilegales, por eso se eligió ese momento.
Como consecuencia se dieron de baja decenas de miles de dominios sin registro. Son plataformas que no se ajustan a las especificaciones técnicas de rigor, como el control de la edad de los usuarios, los límites de apuestas y la protección de datos. Tampoco cuentan con garantías de pagos.
En su comunicado, Interpol resaltó que las apuestas clandestinas representan unos €1.700 trillones al año en todo el mundo, según el cálculo de la Asian Racing Federation. Las bandas que se dedican a este ilícito suelen estar relacionadas con otros tipos de delitos, como ha probado el operativo “SOGA X”.
Anteriormente, Interpol ya había dado golpes similares, aunque de menor escala, tanto en España como en otros países. Las autoridades están viendo con preocupación cómo avanza el fenómeno de las apuestas online en todo el mundo, en muchos casos sin reglamentaciones que le den un marco jurídico y fiscal.
Una red de apuestas que implicaba trata de personas
Uno de los puntos más altos del operativo fue el descubrimiento de una organización que utilizaba el tráfico humano para sus funciones. El caso se dio en Filipinas, donde las autoridades locales, junto con Interpol, aprehendieron a los responsables de un centro de estafas.
El modus operandi de la banda se daba a través de falsas promesas de trabajo para una agencia legal de apuestas, con licencia para funcionar en el país. Poco a poco las personas iban cayendo en una trama de amenazas y engaños que los imposibilitaba salir del sistema.
Las fuerzas de seguridad rescataron a unas 650 personas, de las cuales 400 serían filipinos y 250 extranjeros. A estos últimos se les habría quitado el pasaporte para obligarlos a trabajar en la banda delictiva.
Este caso resulta calamitoso porque se trata de una red que se valía de una marca habilitada para llevar a cabo fraudes como la ciberestafa, la duplicación de la identidad, el robo de datos personales y el lavado de dinero.
Las personas que fueron rescatadas admitieron haber tenido que realizar todo tipo de engaños, como la estafa romántica, el timo con criptomonedas y otros chantajes virtuales. Estas modalidades de delito están en franco crecimiento, y muchos expertos notan su epicentro en Asia.
Gracias a las tecnologías prestadas por Interpol, las autoridades filipinas pudieron rastrear el flujo de dinero de la red e identificar a muchas de las víctimas de las estafas.
El empresariado también pide un freno a las apuestas ilegales
Las organizaciones dedicadas al juego clandestino no solo comportan un problema para los potenciales usuarios, sino que son una preocupación para la oferta legal. Las plataformas de apuestas que operan con licencias de mercados regulados vienen pidiendo un mayor esfuerzo para ponerle fin a las bandas delictivas.
Según el regulador alemán, un tercio de las apuestas que se llevan a cabo en el país transcurriría en portales no registrados. En tanto crece la persecución parte de las autoridades, más se sofistican los mecanismos mediante los que operan las casas de apuestas clandestinas.
Este año, la Asociación Europea de Juegos y Apuestas (EGBA, por sus siglas en inglés) publicó una nota en la que pone en relieve la problemática de la oferta ilegal. Las empresas que invierten en licencias y sistemas de seguridad se ven afectadas por la competencia desleal, ante operadores que casi no tienen gastos de funcionamiento.
EGBA está compuesto por seis de las corporaciones más grandes de juego en la región: bet365, Betsson, Entain, Evoke, Flutter y Kindred. En conjunto, cuentan con unos 31,2 millones de clientes a lo largo de 22 países.
Desde cierta parte del empresariado se sostiene que el crecimiento del juego ilegal está vinculado con restricciones a las comunicaciones comerciales de las firmas habilitadas. Si las plataformas no ejercen la totalidad de sus facultades publicitarias, el público no sabría la diferencia entre la oferta legal y la clandestina.
Esta hipótesis no ha terminado de comprobarse, puesto que las plataformas fraudulentas crecen de igual manera en los mercados con restricciones que con aquellos donde hay plena libertad de mercado. En lo que todas las partes están de acuerdo es que se necesita de mayor eficiencia para erradicar el juego ilegal de raíz.