Escrito por: Facundo Rossi
Con una legalización que solo llega a algunas provincias de todo el territorio, Argentina tiene el desafío de frenar el avance de la ludopatía entre los jóvenes. Un problema que se agrava cuando proliferan las plataformas ilegales, sin control de identidad, y que ahora el Congreso busca resolver a través de la prohibición a la publicidad.
Argentina enfrenta múltiples desafíos en el mercado de juego online.
Un mercado legalizado, pero de a partes
Argentina tiene una particularidad en relación con las legislaciones de juego de América Latina, y es que la materia no se administra por vía nacional, sino que depende de la autonomía de cada provincia. Esto ha llevado a que cada jurisdicción sancione reglamentos diferentes, sin ningún tipo de unidad.
Es un modelo inspirado en el de Estados Unidos, con la diferencia de que en aquel país el federalismo tiene una magnitud real, mientras que en Argentina la dirección política se articula exclusivamente desde Buenos Aires. La falta de homogeneidad en el juego ha mostrado su complejidad en el último tiempo.
La llegada de los juegos y las apuestas online cambió los actores de la industria, tanto desde el lado de la oferta, que pasó a estar representada por empresas multinacionales, como desde la demanda, que bajó su promedio de edad de manera significativa.
Además, la masificación de las apuestas a distancia se dio en el marco de la pandemia y de una crisis económica y social que, desde ese entonces, solo se ha profundizado. Con esto, la industria de los casinos online y las apuestas deportivas en Argentina sacó a relucir uno de los rostros menos felices de la sociedad.
Muchas personas, sobre todo jóvenes, se volcaron a la actividad como si se tratara de inversión financiera. La falta de oportunidades laborales y la pérdida de poder adquisitivo fueron factores que llevaron a la población a buscar recursos por cualquier vía.
En el plano legal, mientras que algunas provincias legalizaron la actividad, otras se mantuvieron impasibles. Entre las que comenzaron a emitir licencias se cuentan Buenos Aires, Córdoba y Mendoza, además de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. En suma, los mercados más rentables del país.
¿Qué cambia con una legislación provincial?
En las provincias que legalizaron el juego online, la autoridad de loterías y casinos se dedica a la emisión de licencias. Esto representa un paso decisivo, puesto que implica que, oficializada la actividad, solo las empresas con permiso de las autoridades tendrán acceso a la oferta de sus servicios.
Como agregado, las legislaciones tuvieron en cuenta la persecución de las plataformas clandestinas. Sin embargo, este paso no fue dado con firmeza desde un primer momento, y hubo que esperar hasta que se visibilizara la ludopatía juvenil para que las gobernaciones tomaran medidas.
Uno de los casos se vio en CABA, donde la Jefatura de Gobierno creó la Fiscalía Especializada en Juegos de Azar de la Ciudad (FEJA), a cargo del Dr. Juan Rozas. Fue uno de los ejemplos en los que se vio en defensa de las garantías de los usuarios y de los operadores habilitados.
Desde la entidad se llamó a declarar los influencers que promovían sitios sin licencia. También se colaboró con el allanamiento de una red de apuestas ilegales, en la que participaban desde programadores hasta cajeros.
En cuanto a la provincia de Buenos Aires, lanzó un Plan Integral de Prevención de la Ludopatía, con alcance en escuelas y centros deportivos. Además, desde el Instituto provincial de Loterías y Casinos (IPLyC) también se procedió a la denuncia de las campañas en redes que anunciaban plataformas sin licencia.
Sobre todas las cosas, los distritos que regularizaron la actividad comenzaron a recaudar impuestos. En ningún caso se han oficializado las cifras, que quedaron en especulaciones iniciales. En mercados regulados de juego online como España y Portugal se puede acceder a los balances trimestrales de ingresos, lo cual brinda transparencia al sector.
Los desafíos del juego online en Argentina
A partir de la intervención del Congreso Nacional en la publicidad del sector, podría suceder que la legislación de juego online comenzara a unificarse. En ciertas áreas, ya existe un consenso a nivel nacional, promovido por organizaciones como la Asociación de Loterías, Quinielas y Casinos Estatales de Argentina (ALEA).
Una de las directrices que han tomado todos los operadores legales del país es radicarse en el dominio .bet.ar. De esta forma, los usuarios pueden percibir a simple vista que se trata de una empresa habilitada. Desde ALEA también se ha organizado talleres formativos para analizar el estado de la industria y su alcance.
De todas maneras, el primer paso tangible en Argentina estará relacionado con la publicidad. El Senado, que se encuentra en una honda crisis institucional, deberá ratificar o rechazar el proyecto que se aprobó en Diputados.
En distintas provincias ya existen propuestas particulares para restringir las comunicaciones comerciales de casinos online y casas de apuestas. Uno de los casos es Córdoba, donde el juego clandestino crece a un ritmo superior al juego legal.
Además, un estudio realizado por la Universidad Nacional de esa provincia relevó que el 40% de los encuestados, jóvenes universitarios de entre 18 y 21 tiene experiencia en el juego online. Se trata de una investigación llevada a cabo por la Facultad de Psicología.
Claramente, en el 2025 el fútbol estará bajo la lupa. Actualmente, los equipos más resonantes reciben patrocinios de casas de apuestas. Basta mirar las camisetas de River o de Boca para encontrar a dos de las multinacionales de juego con actividad en el país.
Si el proyecto de ley se formaliza, los patrocinios deportivos dejarían de estar permitidos. Ya hay un antecedente de un equipo que, motu proprio, decidió no renovar con su sponsor de apuestas. Es el caso de Vélez Sarsfield con bplay, el operador del Grupo Boltd.
Por esta política, el club recibió un reconocimiento de la Cámara de Diputados. Desde otras facciones del deporte, empero, se hacen oír críticas a este modelo, que dificultaría la financiación de la instituciones.
Hasta el momento, la legalización del juego online por provincias no ha dado buenos resultados, ya sea por impericia de las autoridades o por condiciones socioeconómicas adversas. A partir del próximo año, la prioridad parece ser la reducción en el índice de ludopatía juvenil. Un problema que, hace apenas 5 años, no estaba ni siquiera cerca de la agenda.
