Escrito por: Juana González
La sorpresiva derrota de Sport Boys por 6 a 2 frente al modesto club C. A. Manucci encendió las alarmas y hasta una casa de apuestas pidió que se investigue. Este caso se suma a otros de alta sospecha en la Liga1 de Perú, en la que las empresas de juego online son las principales patrocinadoras.
Sospechas de amaño en el fútbol peruano.
Increíble derrota y acusaciones de arreglo en Perú
Se vive un momento crítico en el fútbol peruano a causa de las reiteradas denuncias por amaños de partidos. El último caso fue la llamativa derrota de Sport Boys Association por 6 a 2 frente al club Carlos A. Manucci. El resultado fue recibido con sorpresa y escepticismo.
No solo la prensa peruana y los hinchas de ambos equipos expusieron dudas sobre la integridad del encuentro, sino que incluso una casa de apuestas pidió que se investigue el tema. Se trata de Meridianbet, un operador habilitado por el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur).
La casa de apuestas anunció que su departamento de riesgo e investigación analizará todos los tickets correspondientes al partido en función de establecer si hubo irregularidades. Los principales periódicos deportivos titularon con sorna los informes sobre el encuentro, y hasta la afición se burló de lo sucedido.
Ocurre que Carlos A. Manucci partía de muy bajas chances de obtener la victoria en condición de visitante. Sport Boys había recibido 11 goles en los 7 partidos disputados anteriormente. Nada hacía suponer que le anotarían 6 tantos en un solo encuentro, menos aun frente a uno de los equipos más débiles del torneo.
Al repasar el encuentro, se puede notar que el conjunto local brindó facilidades inusitadas en numerosas jugadas, sobre todo en el área del mediocampo y la defensa. Ha sido notorio cómo los centrales Jorge Ríos y Facundo Mansilla se resignaron a seguir sus marcas, además de regalar balones inéditos.
Desde luego que cualquier jugador de fútbol, y cualquier persona en general, puede tener un mal día, con malos rendimientos. Sin embargo, los antecedentes de corrupción en el fútbol peruano encienden las alarmas ante cualquier contingencia de este tipo, especialmente en tiempos en los que las apuestas online se han vuelto moneda corriente.
La respuesta de los equipos, la Liga 1 y los barras
Apenas se dieron a conocer las sospechas, desde el Club Sport Boys Association se emitió un comunicado con tres puntos sobre el tema. El primero de ellos es la notificación de conocimiento sobre la denuncia de Meridianbet y lo que ello implica para la entidad deportiva.
En segundo lugar, Sport Boys expresó su comunicación con el área de integridad de la Federación Peruana de Fútbol (FPF) para solicitar pruebas sobre la denuncia. Asimismo, el club dio a entender que la denuncia mancha su reputación y perjudica su relación con la hinchada.
En último término, la institución y su Administración Provisional reafirmaron su compromiso con la transparencia en el deporte, al tiempo que mostraron su repudio ante cualquier hecho que atente contra los principios de la competencia.
Desde Carlos A. Manucci se notó un gran enojo contra Meridianbet, puesto que la denuncia de la casa de apuestas supone la falta de méritos del club. Por eso es que se la conminó a mostrar las pruebas que se relacionen con la denuncia. El club está luchando por no descender de categoría.
Incluso desde la organización de la Liga1 se publicó una nota sobre el tema, haciendo referencia a los esfuerzos de la FPF por erradicar cualquier tipo de irregularidad en el torneo. Para ello han puesto a disposición sus recursos técnicos en pos de aclarar la situación y llevar tranquilidad a los aficionados.
Cabe destacar que la barrabrava y algunos hinchas independientes de Sport Boys no necesitaron de mayores pruebas para hacerse presentes en el entrenamiento del predio de Pachacamac, Lima. Desde las gradas increparon a los jugadores y al cuerpo técnico, en especial al arquero Steven Rivadeneyra.
El camino del fútbol de la mano de las casas de apuestas
Este tipo de situaciones no son nuevas en el deporte, pero las sospechas sobre amaños parecen haberse acrecentado a partir del influjo de las plataformas de apuestas como patrocinadores de las ligas y clubes. No se trata de una contingencia particular de Perú sino de un fenómeno global.
La credibilidad de la Liga1, sobre todo, se ha dañado desde que su sponsor principal, y prácticamente su lema institucional, es Te Apuesto. Un cambio de rostro para el fútbol peruano que ha traído consecuencias.
Carlos A. Manucci, por su parte, está auspiciado por la casa de apuestas DoradoBet, una de las plataformas más conocidas de Perú, con presencia en otros mercados latinoamericanos.
La empresa Sportradar, especializada en estudios deportivos, envió un primer informe a la FPF. Allí se da cuenta de que no hay pruebas materiales para garantizar que hubo amaños en el partido en cuestión. No obstante, los antecedentes del fútbol peruano dan motivos para seguir pensando.
Es que la Comisión Nacional de Árbitros (CONAR) ha confirmado que desde el año 2021 se han probado diversos arreglos de partidos en el país. A esto se le suman casos muy polémicos en el pasado.
Uno de los más mencionados fue en 2017, cuando dos futbolistas del UTC de Cajamarca, Jarlín Quintero y David Díaz, fueron vistos en la sede de una conocida casa de apuestas. Esto se dio tras una derrota muy extraña de su equipo por 3 a 1, luego de ir ganando el encuentro.
En efecto, en algunos países se han prohibido desde el gobierno las conexiones entre empresas de juego y entidades deportivas. Tal es el caso de España. En otras ligas, como la Premier League, los propios clubes se comprometieron a abandonar los patrocinios de este rubro de manera independiente.
En un espacio geográfico más cercano, ha sido relevante el caso de Vélez Sarsfield de Argentina, que rechazó la renovación de su contrato con bplay. Además de las polémicas por amaños, en el país sudamericano se suma la fuerte oleada de ludopatía juvenil, sin control de las autoridades estatales.
Para las instituciones es difícil rechazar las ofertas de las casas de apuestas, que casi nunca se equiparan con los sponsors de otros rubros. A pesar de eso, no hay dudas de que el fútbol ha perdido algo de credibilidad desde que las “bets” están instaladas en las pantallas, las camisetas y los estadios.
