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Ecuador: polémica por la prohibición a la publicidad de apuestas

El presidente Guillermo Lasso ha modificado el reglamento de la Ley Orgánica de Comunicación para prohibir la publicidad de apuestas y predicciones deportivas. Los cambios también alcanzan a otras áreas. Ya ha surgido un fuerte rechazo a la medida, en especial desde el ámbito del fútbol, uno de los principales favorecidos por el patrocinio de casas de apuestas deportivas online.

Protesta social en Ecuador, gente marchando con banderas y cuernos.

El gobierno de Lasso se despide del poder con una polémica reglamentación. (©SantiagoGonzález_ad/Pixabay)

Un nuevo reglamento de publicidad, con espíritu restrictivo

Ecuador está sumido en importantes cambios, y su escenario político está muy movilizado. Ahora existe un gran debate en torno a la más reciente medida del presidente Guillermo Lasso, del partido neoliberal Movimiento CREO (Creando Oportunidades). Se trata de un nuevo reglamento general en la Ley Orgánica de Comunicación, en donde se prohíbe la publicidad de apuestas deportivas.

Los agregados al estatuto fueron presentados en un acto oficial que encabezó el propio presidente. En el artículo 56, las apuestas deportivas son equiparadas a la publicidad engañosa, a la pornografía infantil, y a los cigarrillos y demás sustancias sujetas a fiscalización especial. Así pues, las casas de apuestas quedarán excluidas de los derechos publicitarios de los que gozan otras áreas del entretenimiento en Ecuador.

Esta enmienda llega luego de la reforma casi total de la Ley de Comunicación. El año pasado, bajo el gobierno de Lasso se presentaron objeciones contra 51 artículos de la ley original, sancionada en 2013 durante el mandato de Rafael Correa.

La reestructuración de la ley también tuvo la intención de restarle poder mediático a las organizaciones de narcotráfico, aunque desde entonces la violencia y la crisis en el país solo han aumentado.

Una de las principales objeciones desde el sector del juego ha sido la incompatibilidad de esta medida con la reglamentación fiscal aprobada en el mes de mayo de este mismo año, cuando se acordó el pago de un canon por la prestación de servicios en el país. Las empresas operadores de apuestas deportivas ya han anunciado que irán por la vía legal para apelar la prohibición, representadas por un equipo de abogados locales.

Rechazo de las casas de apuestas y de la prensa

Lejos de encontrar acogida entre sus principales partes, la nueva reglamentación de Lasso ha despertado críticas. Desde el sector del juego existe un fuerte repudio a la comparación con rubros clandestinos e inmorales como la pornografía infantil. La industria de las apuestas ya está asentada comercialmente en el país, a través de vínculos con empresas reconocidas, y tiene una excelente acogida en la sociedad. La vinculación tendenciosa con tabúes puede resultar confusa para la audiencia menos informada.

Además, ya se ha hecho notar que la gran mayoría de los operadores de apuestas deportivas están emplazados en el extranjero, dadas las dificultadas para hacer sede en el Ecuador. Según el Servicio de Rentas Internas (SRI), de las 33 casas de apuestas online, solo 6 se hallan en el país. Así pues, sería imposible hacer que las 27 empresas radicadas en el exterior pagaran multas por incumplimiento de la ley ecuatoriana de comunicaciones.

Desde el lado de la prensa, ya se ha hecho oír la voz de la Asociación Ecuatoriana de Radiodifusión (AER). Su presidente, Kléber Chica, firmó una nota en la que apunta las contradicciones de la enmienda a la ley, además de marcar las dificultades económicas que esto conllevaría para el área de los medios, generalmente patrocinada por casas de apuestas.

Dentro de la prensa ecuatoriana, están los defensores de la antigua legislación de Rafael Correa, de espíritu combativo con los monopolios y la concentración de medios, pero también los hay que prefieren la perspectiva de Lasso, mucho más orientada a separar al Estado de los aparatos comunicativos del sector privado.

La Liga Pro de fútbol se declara en rebeldía

Otro de los sectores que no se ha tomado nada bien la nueva Ley de Comunicaciones es el fútbol profesional, que hoy en día recibe un enorme estímulo del sector del juego en materia de patrocinios deportivos. La propia Liga está auspiciada por Bet593.ec, casa de apuestas de la Lotería Nacional. El operador pagó este año la suma record de US$15 millones por cinco temporadas, tras suceder a Betcris, anterior sponsor.

El impacto económico en el fútbol sería enorme, considerando que las empresas de juego online son las principales auspiciantes de clubes como Emelec, Aucas, El Nacional, Deportivo Cuenca, Mushuc Runa, Gualaceo, Cumbayá y Guayaquil City.

Las autoridades de la Liga Pro ya han alegado la inconstitucionalidad de la medida dictada por Lasso, en tanto que resulta incompatible con los artículos 132 y 133, que versan sobre los derechos y garantías de los privados. Además, desde la organización aprovecharon para remarcar que el gobierno le ha puesto trabas extra al deporte con la imposición del IVA sobre las entradas; a raíz de eso, los precios subieron y bajó la asistencia a los estadios.

El debate en torno a la ley de comunicaciones y el alcance de la publicidad parece tener varios números más por delante, y podría ser el primero de varios en la región, dado el avance de la industria del juego en el deporte profesional en países como Argentina, Chile y Brasil. Desde la pandemia, y tras las prohibiciones en mercados europeos, las casas de apuestas han invertido fuertemente en publicidad en América Latina. El caso de Ecuador podría ser el quiebre en esa dinámica.

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