Tras la publicación del reglamento de juego online, las autoridades peruanas han trazado un cronograma para poner en marcha las funciones de la industria. La entidad a cargo del control y la supervisión, así como de la emisión de licencias, es el Ministerio de Comercio Exterior y Turismo (Mincetur). Los operadores tienen tiempo hasta el mes de julio para presentarse.
Una convocatoria que genera gran interés
La reglamentación de las apuestas a distancia en Perú ha significado una modernización del mercado, mediante la que se ha conseguido atraer la atención de los principales operadores del rubro. El país presenta una gran oportunidad, si las condiciones institucionales acompañan, en vista de que su población es muy aficionada a los deportes y cada vez hay mayor penetración tecnológica. Las apuestas deportivas tienen todo para ser un nuevo fenómeno de masas.
El reglamento promete ser un adelanto tanto para empresas, que actuarán bajo una estructura legal, como para los usuarios, que a partir de ahora tendrán garantías de transparencia constatables a través del Estado. Según han informado desde Mincetur, habrá controles estrictos para la prevención de los sectores vulnerables, sobre todo con miras a no fomentar la actividad entre los jóvenes. Esta misma perspectiva es la que deberán compartir los operadores que soliciten las licencias.
A partir del mes de octubre, se abrió un proceso de 270 días para que las partes interesadas pidan sus habilitaciones. Para ello deberán ajustarse a los requerimientos técnicos, financieros y de juego responsable que especifica la ley, conforme a lo que ha hecho público Mincetur. El plazo cierra el 14 de julio del 2024. En esa instancia, el mercado de juego online de Perú promete verse bastante diferente del actual.
Paso a paso, lo que se espera en 2024
Si bien los operadores técnicamente ya pueden presentar sus solicitudes, la Ley de Apuestas Deportivas y Juegos en Línea entrará en vigencia el próximo 9 de febrero, según indican los medios peruanos. Resulta interesante que las plataformas que ya están en funcionamiento no tendrán la obligación de interrumpir sus funciones en tanto que presentan su documentación ante Mincetur. Sin embargo, los nuevos operadores que deseen ingresar al sistema deberán esperar hasta que la autoridad de control les garantice su licencia.
Algunos de los requerimientos son la homologación de las verticales y la asignación de un representante legal en Perú. Esta persona es la que se encargará de lo relativo al registro de la plataforma que recibir su autorización.
A partir del mes de enero, Mincetur comenzará con los testeos técnicos para probar la conexión de los proveedores de apuestas con el centro de datos. Esto permitirá conocer los puntos de conectividad y la modalidad del flujo de información.
El siguiente paso comienza luego de la implementación de la ley de juego, el 10 de febrero. Desde esa fecha y hasta el 10 de marzo, los operadores deberán pedir su Autorización de Explotación de Apuestas Deportivas y Juegos a Distancia, que incluye el plan de negocios, y la Autorización y Registro (Homologación), que incumbe al ámbito técnico. Luego de este proceso, Mincetur tendrá un mes para evaluar las propuestas y determinar cuáles serán los actores habilitados. Esto no solo incluye a operadores, sino también laboratorios de testeo, proveedores y otras ramas que forman parte del sector del juego.
Una ventana al futuro del juego en Perú
Con este panorama en frente, se espera que para fines de abril el mercado peruano de apuestas online esté regularizado y con una oferta acorde a la demanda. La autoridad de control asumirá sus funciones de manera permanente, por lo cual las empresas que se desvíen de las normativas deberán pagar multas, ya sea por inadecuaciones a los protocolos de juego responsable, al marco de la publicidad o a las obligaciones fiscales. Las sanciones de Mincetur van desde los US$1.300 hasta los US$260.000, e incluyen la quita de la licencia y una inhabilitación de hasta 10 años, o incluso permanente.
Así pues, Perú tiene todo para convertirse en un modelo de mercado regulado en el que compiten plataformas legales. Es la misma orientación que han asumido países como Colombia, México y Argentina. Algunos de los vecinos sudamericanos aún presentan sistemas monopólicos de juego, como Chile y Paraguay, donde las licencias están adjudicadas a una sola empresa. Perú tendrá la oportunidad de demostrar si el sistema de libre competencia es superador. La seriedad con la que Mincetur se toma la tarea de control será determinante en el asunto.